Agua en el deporte – Agua, una declaración de vida sana

 Para un deportista es imposible alcanzar un buen rendimiento sin tener una correcta hidratación en arreglo a la actividad física que realiza. Es fundamental el agua para el deportista, como nutriente, como tonificador muscular, para expulsar toxinas tras el ejercicio, para digerir correctamente los alimentos, para transportar el oxígeno a los músculos, para la termorregulación.

 Pero en la actualidad, no solo los deportistas profesionales y los atletas realizan una actividad física constante y regularmente. También cualquier persona común puede dedicar varias horas al día a realizar una actividad física para mantenerse en forma y cuidar la salud, o simplemente como entretenimiento saludable. Una actividad física regular y bien practicada es un importante factor de prevención de enfermedades y permite mejorar el estado físico y psíquico. La pérdida de líquidos durante el ejercicio físico disminuye el volumen de plasma y el contenido de agua en los músculos. El corazón se somete entonces a un esfuerzo mayor para bombear la sangre a través del cuerpo. Los  músculos trabajan con menos energía y empiezan a transmitir síntomas de fatiga.

 Lamentablemente, como anteriormente hemos comentado, no hay que recurrir a la sed para elegir el momento de beber agua. Estudios epidemiológicos han demostrado que la mayoría de las personas que hacen deporte, incluso a nivel competitivo y profesional, no beben lo suficiente y, aunque los organizadores de los eventos pongan a su disposición abundantes cantidades de agua y de bebidas deportivas, ellos reemplazan de media sólo dos tercios de los líquidos perdidos. Por otra parte, el líquido no se pierde solamente a través de la piel sino también de los pulmones, en cantidades que pueden llegar a los dos litros para un ciclista profesional. La correcta hidratación de deportistas debe estudiarse y programarse con la misma precisión con la que se estudia y se programa su alimentación. Es decir, hay que elaborar una estrategia de hidratación para dada individuo en función de sus características físicas (en particular, del peso), del tipo de deporte (aeróbico o anaeróbico, de potencia o de resistencia), condiciones climáticas y frecuencia de los entrenamientos y competiciones (en el año, en el mes o en períodos particulares como los de algunos campeonatos). Por lo tanto, hay que beber agua antes y después de cada ejercicio, se recomienda hasta medio litro de agua antes del ejercicio y beber poco a poco a medida que se suda durante el ejercicio.

 Si un deportista esta deshidratado, esta claro que su concentración y su rendimiento bajaran considerablemente, y no solo eso, sino que se exponen a sufrir consecuencias que pueden ser mortales llevadas a extremos, como la temida crisis hipertérmica, que puede llegar a matar al atleta. Es importante destacar la importancia de que los deportistas tengan agua a su disposición durante los entrenamientos y las competiciones. No basta con educar a los deportistas para que programen y mantengan su hidratación, también es necesario que los dirigentes y organizadores garanticen el aprovisionamiento de agua y bebidas deportivas frescas y de sabor agradable. Una solución inteligente es instalar dispensadores de agua buena y fresca.

 ¿Entonces cuanta agua debo beber?

 Una forma sencilla de saber cuando tienes que beber agua y cuando es menos urgente la necesidad es no esperar a la sed, sino comprobarlo con la orina. Dependiendo de si esta es de color más claro, con lo que tu cuerpo esta más hidratado, u oscura, señal de que tu cuerpo necesita más agua. Otra forma de asegurarse de estar hidratado, es manteniendo una dieta basada en frutas, verduras, carbohidratos y baja en grasa, y acompañar esta dieta de ejercicio físico regular y controlado. Es conveniente también reducir la cafeína y el alcohol.

 Puntos más importantes:

  • Los deportistas corren el riesgo de deshidratarse fácilmente.
  • La deshidratación disminuye el rendimiento del deportista considerablemente.
  • No esperar a la sed, beber antes, durante y después del ejercicio físico para asegurarse la hidratación.
  • Los organizadores de eventos deportivos deben instalar puntos de abastecimiento de agua. Los deportistas deben tener fácil acceso al agua o a las bebidas específicas.

Quienes practican deporte deben llevar una dieta suficientemente rica en carbohidratos, frutas y verduras, y pobre en grasas.